Síntomas como sensación de pesadez o cansancio en las piernas pueden aflorar antes de la aparición de várices.
Un masaje especialmente desarrollado, puede contribuir a aplacar la evolución de las dolencias varicosas, causadas por factores hereditarios, obesidad y traumatismos físicos.
Este masaje produce un alivio inmediato y deja las piernas más saludables y modeladas.